Querida Oruga Glotona...
¡Cuánto hemos aprendido gracias a tu cuento!
Por fin ha llegado ese momento tan esperado por todos... ¡poder ver las mariposas!
Como ya sabíamos, se trata de unas mariposas distintas a las que conocemos. Hemos podido ver su color, sus alas y también comprobar si alguno de los dos era macho.
Y ¡así es! ¡parecía que quería volar, agitaba mucho las alas!
¿Cuál ha sido nuestra sorpresa?...¡Mirad, mirad!
¡Hay un montón de huevecitos!
Gracias Oruga Glotona por enseñarnos tu ciclo vital y poder compartir tantas caras de asombro, sorpresa, entusiasmo e ilusión.